Esta fue la frase que domino la mañana. Una veintena de padres preocupado por sus chorizos (leáse literalmente sin mediar metáfora alguna) y sus patys, caminaban e interrogaban sobre el destino de los enceres para el almuerzo.
Esto ocurría paralelamente al entrenamiento de los chicos, el cual fue frúctifero nuevamente. Alguna queja surgió con respecto a la dureza del piso, pero lejos de eso todo fue sobre rieles hasta el dichoso partidito, donde ocurrieron ciertas divergencias próntamente zanjadas.
Nuevamente debo críticar el tema horario, sobretodo una duda que ronda en la cabeza de los entrenadores: ¿Porqué el día de los partidos que incluso la cita es más temprano llegan, todos medianamente a horario y no los días de entrenamiento?.
Por favor, empecemos a poner un poco de pilas en esto. Por ahora somos los padres los encargados de que lleguen a tiempo.
Empieza el receso, tenemos dos semanas sin rugby infantil. Esto no quiere decir que los chicos no se junten en el club los sábados. Sobre todo el que viene que la superior juega contra Italiano de local. Así que el sábado 15.30 la 96 a alentar a los mayores.
Terminada la jornada deportiva se dió paso a lo gastrónomico de la mano de Don Santos que, una vez convenido el costo de su servicio, nos brindo el calor de sus brasas para nuestros comestibles.
Hubo también un zona regada convenientemente por el Señor Malbec o Cabernet, no puedo precisar el nombre del mismo. Y todos comimos cual picnic quinciañero en el quincho dos. Al promediar la velada fuimos invitados por los padres de la séptima a compartir los postres que ambos aportamos al efecto. Alguien trajo un guitarra y estalló la fiesta con cantos folkoricos productos de alguno vapores etílicos. Aquí se produce un blanco en esta nota porque el redactor huyo a ver el partido de la superior contra St. Brendans. Así que algun corresponsal tenga a bien mandar un breve informe con el informe final de tan fina reunión.
Buenos señores se viene el receso y este cronista como no tiene mucho más que contar se despide de Uds. hasta que las novedades ocurran.
Besitos y cariñitos a todos los niños
Un aplauso para el asador...
Buenas vacaciones, no maten a sus hijos ningún juez los va exonerar.
JUAN CARLOS PATERNITI
CRONISTA EN VACACIONES
Nuevamente debo críticar el tema horario, sobretodo una duda que ronda en la cabeza de los entrenadores: ¿Porqué el día de los partidos que incluso la cita es más temprano llegan, todos medianamente a horario y no los días de entrenamiento?.
Por favor, empecemos a poner un poco de pilas en esto. Por ahora somos los padres los encargados de que lleguen a tiempo.
Empieza el receso, tenemos dos semanas sin rugby infantil. Esto no quiere decir que los chicos no se junten en el club los sábados. Sobre todo el que viene que la superior juega contra Italiano de local. Así que el sábado 15.30 la 96 a alentar a los mayores.
Terminada la jornada deportiva se dió paso a lo gastrónomico de la mano de Don Santos que, una vez convenido el costo de su servicio, nos brindo el calor de sus brasas para nuestros comestibles.
Hubo también un zona regada convenientemente por el Señor Malbec o Cabernet, no puedo precisar el nombre del mismo. Y todos comimos cual picnic quinciañero en el quincho dos. Al promediar la velada fuimos invitados por los padres de la séptima a compartir los postres que ambos aportamos al efecto. Alguien trajo un guitarra y estalló la fiesta con cantos folkoricos productos de alguno vapores etílicos. Aquí se produce un blanco en esta nota porque el redactor huyo a ver el partido de la superior contra St. Brendans. Así que algun corresponsal tenga a bien mandar un breve informe con el informe final de tan fina reunión.
Buenos señores se viene el receso y este cronista como no tiene mucho más que contar se despide de Uds. hasta que las novedades ocurran.
Besitos y cariñitos a todos los niños
Un aplauso para el asador...
Buenas vacaciones, no maten a sus hijos ningún juez los va exonerar.
JUAN CARLOS PATERNITI
CRONISTA EN VACACIONES
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